Mejor conocida por su papel de Lupita en la segunda temporada de Club de Cuervos, Estibalitz Ruiz es una chava mexicana y multifacética que gusta de la actuación, el baile y el arte.
Cuando era niña, Estibalitz no era de las que jugaba a ser maestra o enfermera. En su mente siempre estuvo la idea de ser actriz.
“No sé a qué edad decidí que quería ser actriz. Sé que fue algo que estuvo constantemente en mi mente desde muy niña: cantar, bailar y actuar porque así era como yo conocía el mundo. Creo que tuve mucha influencia de mi madre y de mi abuela. Mi abuela daba clases de música y mi mamá fue concertista de piano y cantante en la filarmónica de la UNAM. Ellas siempre me inculcaron el amor por la música y por el arte”.
Empezó a trabajar cuando tenía 15 años. Fue corista y bailarina de Imanol (el de las Canicas), estuvo en el show de Disney y luego fue bailarina de la primera generación de la Academia.
Para estar en donde está ahora, Estibalitz tuvo que enfrentarse a varios retos. De entrada, descubrir que en su país natal no había escuelas que conjugaran las disciplinas que ella estaba buscando.
“Yo quería estudiar Teatro Musical, pero me di cuenta que aquí en México no tenemos escuelas que conjuguen todo; tenemos el Conservatorio Nacional de Música, el de danza, el teatro de la UNAM, pero no algo que conforme las tres actividades, entonces el primer reto fue irme a estudiar a Nueva York. Me fui cuando tenía 19 años”.
Estibalitz recibió mucha ayuda de su mamá y de algunos familiares para irse al extranjero, también obtuvo becas para poder estudiar lo que quería. Ese fue el reto más grande para ella en ese momento, pues una vez que regresó a la Ciudad de México, a los 23 años, el universo confabuló a su favor y encontró trabajo.
Y llegaron los cuervos
“Club de Cuervos fue algo súper importante en mi carrera. Llevo ya 10 años haciendo carrera en teatro musical, pero siempre había querido probar en televisión. Club de Cuervos fue un gran aprendizaje porque nunca lo había hecho. Ese fue otro reto al que me enfrenté: no conocer nada e ir agarrando el hilo de cómo se hacían las cosas”.
Esta producción fue un impulso muy grande para ella, ya que se trata de la primera serie mexicana en Netflix, encabezada por Gaz Alazraki y Leonardo Zimbrón, director y productor de Nosotros los nobles.
Gracias a Club de Cuervos, Estibalitz Ruiz obtuvo mayor reconocimiento, tanto que ahora la veremos en la serie de Paquita la del Barrio, pero en un papel mucho más relajado.
“Soy una cocinera muy importante para Casa Paquita. Mi personaje estuvo presente en las etapas más difíciles de Paquita. Y ella tuvo una relación con el mejor amigo de Paquita, pero en realidad ellos siempre se amaron desde chiquitos. Es un personaje muy lindo y muy tierno. Hasta cierto punto muy ingenuo, pero muy honesto, y totalmente diferente al anterior. Yo en Club de Cuervos era una vieja loca, súper psico”.
Estibalitz reconoce que ama actuar en la pantalla chica. Sin embargo, una de las cosas que no descarta a futuro es participar en cine. “Ese es otro lado que quiero explorar, obviamente me encantaría seguir haciendo tele, no quiero que se quede en dos proyectos, quiero continuar en eso y por supuesto en el teatro. Nunca me voy a retirar porque sé que puedo hacerlo, porque me gusta hacerlo y porque voy a seguir trabajando en esto para seguir creciendo”.
No hay que quedarse sentado. Creo que cada trabajo que uno llega a tener sobre todo en esta carrera te enseña que no te puedes quedar sentado, tienes que estar en constante movimiento.
¿Cómo es un día para Estibalitz Ruiz?
Procuro siempre tomarme mi café, es básico. Mis mañanas me fascinan, trato de no hacer todos los días lo mismo, y aunque tengo rutinas, intento no caer en lo mismo.
Soy alguien que le gusta tener muy buena condición física; hago box, yoga, meditación. De pronto hay mucho estrés no sólo en el trabajo sino en la vida, por eso me gusta encontrar 5 minutos de paz al día para mí.
Normalmente siempre trato de estar en mis clases, eso es algo que no dejo, soy muy constante. Eventualmente tomo clases de actuación, me gustaría tomar clases como antes, pero por el tiempo no se puede. Llego a tomar danza, trato de siempre estar en movimiento.
Lección de vida
Estibalitz Ruiz es una chava soñadora, emprendedora, amante de la actuación y del arte. Se define como una persona humilde que le gusta aprender constantemente de los demás y que valora las oportunidades que se vayan presentando.
“Nunca sabes con quién te vas a topar, de quién vas a aprender y quién te va a enseñar. La vida me ha sorprendido mucho, y creo empiezo a ver el resultado de muchas cosas por las que trabajé de muy joven. Tengo muchas ganas de seguir explorando y de ver qué me depara la vida”.