Y quiero que mi
amante ahora seas tú.
Que
modeles mis afectos;
y
me guíes a tu cama para darme el beso de las buenas noches,
cada
noche.
Discutir
nuestros planes en una mesa la que estemos sólo los dos
y
donde tú tengas siempre la última palabra,
la
última cerveza.
Mi
opinión por tu voluntad deberá ser torneada.
Por
ti seré todo esponja.
Porque
eres como un chorro de semen que salpica mi fantasía.
Oblígame.
Haz que me hinque ante ti.