Existen muchas formas de ser un intelectual chafa, la más famosa es fingir que se posee una erudición que en realidad es ficticia, sin embargo, en esta ocasión nos vamos a enfocar en los que sí se cultivan o al menos le hacen al cuento en ello.
1.- Quéjate de todo pero no propongas nada
Critica cualquier tipo de manifestación creativa, de preferencia afirma que tú podrías haberlo hecho mejor incluso con los ojos vendados y además en diez minutos, pero eso sí, no propongas mejores contenidos, ni muestres tus talentos creativos al mundo, porque no te merecen.
2.- Desprecia tu cultura local
Abraza la cultura eurocentrista y desprecia tus orígenes, esto a pesar de que subas fotos de indígenas en blanco y negro a tu Instagram (con los cuales te cruzaste en la Condesa saliendo del Starbucks).
3.- Desarrolla una filia por los libros
Pero eso sí, que tu filia abarque sólo al libro como objeto, al contenido no lo peles. Entre más fotos subas mejor. También necesitarás adquirir libros viejos y de autores Bielorrusos o Chechenos o de autores que nadie conoce.
4.- Cómprate una máquina de escribir
No importa que no escribas nada, el chiste es tenerla, tomarle fotos, y de vez en cuando irte al Starbuck con ella, te sientas en un lugar donde todos te vean y frunces el ceño mientras contemplas la hoja en blanco y bebes un trago de tu café de cien pesos.
5.- Vuélvete un amante de la fotografía
Necesitarás una cámara DSLR, aunque nunca cambies de objetivo y sólo dispares en automático, el chiste es andar en la calle con una cámara al cuello y subir muchas fotos tuyas apuntándole a algo, a lo que sea (lo cual no importa, el chiste es que te veas tú, tú, tú y tu pasión por la foto).