Si hay un elemento que destaca en el mundo de la belleza y la cosmetología son las pestañas. Actualmente existen una infinidad de productos para lograr una mirada más impactante, las más comunes son las mascaras de pestañas adicionadas con propiedades que ayuden al fortalecimiento de las mismas. Sin embargo, muchas de las veces no es suficiente y hay que darles una empujoncito más, es verdad que en el mercado existen productos específicos para acelerar el crecimiento de las pestañas, fortalecerlas y hacerlas más abundantes, aunque también es cierto que suelen ser un tanto costosas, pero aquí te dejamos una solución casera muy económica que ayudará a que tus pestañas sean la sensación, incluso si tus pestañas son naturalmente pequeñas y lacias.
Necesitas:
- El hueso de un mamey
- 50 ml de aceite de almendras dulces
- Un rallador
- Una botella de vidrio o plástico limpia y esterilizada
Modo de Preparación:
Debes romper la cáscara del hueso de mamey, en el interior encontrarás una especie de almendra color marrón.
Posteriormente deberás rasparla con el rallador, tan fino como tú lo desees. La ralladura que obtengas la tienes que incorporar con el aceite de almendras.
Vierte la mezcla en la botella y deja reposar por tres días.
Después de desmaquillarte por las noches, aplícate una pequeña cantidad del aceite con ayuda de un hisopo o un cepillo para pestañas, puedes reutilizar el cepillo de un rímel que ya hayas terminado o que ya no utilices, sólo asegúrate de lavarlo bien. Repite este paso diariamente por 5 semanas y notarás el increíble resultado.
Recuerda que los beneficios de cualquier producto sólo se verán reflejados si eres constante.