A pesar de que las encuestas y diversos analistas políticos daban por hecho el triunfo de Hillary Clinton, el republicano Donald Trump resultó ser el ganador de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, de modo que el 20 de enero del 2017 este polémico personaje “despachará” en la Casa Blanca.
La victoria inverosímil cambiará por completo la política norteamericana y las relaciones diplomáticas y económicas entre países, pues a diferencia de la ahora ex candidata demócrata que buscaba una América unida, Trump persigue una América más fuerte, a su manera conservadora y racista, tal como la definen diferentes politólogos del mundo.
¿Qué consecuencias trae para las industrias esta resolución? De entrada, cuando Donald Trump comenzó a aventajar a su contrincante el pasado martes, la divisa estadounidense alcanzó un nuevo máximo histórico interbancario (20 pesos).
Al haber una diferenciación en el tipo de cambio, hay un aumento del precio para el consumidor final, y aunque las marcas hagan ciertas estrategias de marketing para aminorar el impacto, sí hay un efecto, sobre todo en industrias de cosméticos, de consumo masivo o aquellas, cuyos insumos son comprados y pagados en dólares.
Hay industrias como la automotriz o la textil a las que no les impacta igual el tipo de cambio, pues aunque parezca que las materias primas les salen más caras, pueden ser más competitivos a nivel internacional, toda vez que los procesos de producción son en pesos, y eso les abre más puertas de exportación y mayor ganancia.
Sin embargo, habrá que ver qué pasa con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ya que Trump dejó clara su intención de renegociar el tratado o bien salirse de él, de no obtener mejores condiciones. Además amenazó a las compañías estadounidenses al afirmar que habrá consecuencias para las firmas que inviertan fuera del país y se lleven los empleos.
No menos importante es la construcción del muro prometido, y advertido, a fin de mermar la migración de los mexicanos a Estados Unidos. La idea, y discurso político de Trump, es que México deberá pagar por la valla, pues los mexicanos se han aprovechado de manera desproporcionada del TLCAN entre ambos países, y en consecuencia miles de empleos y compañías estadounidenses se han trasladado al sur de la frontera.
De momento, el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, dijo que México cuenta con solidez para enfrentar la volatilidad por el triunfo de Trump en Estados Unidos. No obstante no ha emitido un plan de acción para hacer frente a la caída del peso frente al dólar.
A nuestro juicio, la depreciación favorece las opciones de las marcas hacia plataformas. En el caso de México, no hay que dejar de lado que en mobile es uno de los países más importantes en cuanto a penetración, eso representa mucho en ventas, y por supuesto un área importante de oportunidad ante esta incertidumbre geopolítica y económica.
Foto tomada de las redes sociales.