Tener un gato, como cualquier mascota, representa grandes responsabilidades, desde la alimentación, vacunas e higiene necesarios; hasta cuidados propios de cada gato.

Cuando hablamos de mascotas, el gato es una de las especies socialmente más populares, esto es debido a los lazos emotivos que se puede generar entre gato y humano. No es de extrañar que exista tanta cantidad de productos para felinos si las personas están dispuestas a gastar tanto en ellos.

En nuestro primer artículo, hablaremos sobre la higiene del gato. Existen numerosas cantidades de champús, collares, pipetas y talcos antipulgas; acondicionadores, espumas de limpieza, etc. Es muy importante mantener limpio al gato, si bien es cierto que ellos mismos limpian su pelaje, en caso de ser atacado por pulgas es necesario erradicarlas.

Si se tiene al gato desde muy pequeño, hay que acostumbrarlo al baño, de lo contrario, siendo mayor será más complicado. El pelaje del gato no está hecho para protegerlo de las temperaturas si es mojado, absorbe el agua y la retiene, es por esto que el agua representa una molestia para ellos. Lo ideal es que el agua esté tibia, para evitar un choque de grados.

Para evitar sufrimientos innecesarios en los gatos que le temen al agua, es recomendable el talco o las pipetas antipulgas que se aplican mensualmente.

Los gatos son animales pulcros por naturaleza, pero como todo ser vivo, necesitan hacer sus desechos. Por instinto, ellos buscarán un sitio dónde poder cubrir sus heces, por lo que una caja con arena resolverá el problema. Como los gatos son limpios, exigirán arena limpia; no hay que olvidar hacer aseo a la arena diariamente y cambiarla cada quince días. Esto evitará problemas de higiene y enfermedades en el hogar.

Tomémonos el tiempo de conocer a nuestras mascotas y recordemos visitar periódicamente al veterinario.