Zauriel Alejandro (San Luis de la Paz, 2000) aprendió a los tres años. Siempre le gustó inventarse historias propias. Así que algunas, para no olvidarlas, las fue plasmando, hasta descubrir que podía hacer algo más con ellas…
Descubrir a Hemingway fue para él un mundo abierto a las posibilidades de la imaginación literaria. Le encantó su manera de narrar. Se identificó con el protagonista de El viejo y el mar: “me trasportó a la barca junto a él”, nos platica Zauriel. En su pubertad comienza a escribir sus historias para un proyecto de libro, inspirado por la maestra Cleo Gordoa. De este modo reúne 18 cuentos y los edita con el nombre de Crónicas de sueño y fantasía (2014), a sus catorce años. La idea de tener un libro propio fue suya, pero gracias a su padre y al apoyo de la Casa de la Cultura de San Luis de la Paz pudo hacer realidad su sueño. Él es uno de los autores que más jóvenes han publicado un libro que conozco. Y hasta el día de hoy, Zauriel no sabe qué sentir al respecto.
Este libro contiene muchos personajes tradicionales de la literatura fantástica como hadas, gnomos, duendes y monstruos, además de extraterrestres. Esto se debe a que le gusta mucho el género. Hasta la fecha es fanático de sagas como Warcraft, El señor de los anillos y Harry Potter. Entre sus libros favoritos también están El club de la pelea y Las flores del mal. Además de la fantasía, la tecnología es uno de los temas que más explora en su novel narrativa, ya que siempre ha estado muy vinculada a ella por el negocio familiar, un cybercafé. “Es algo con lo que las nuevas generaciones están muy familiarizadas” (Zauriel alude a una “generación táctil”). Es por ello que el internet y las redes sociales aparecen mucho en sus cuentos. Destaco el cuento “Monstruos interiores”.
El libro, dedicado a su familia y seres queridos, fue ilustrado por su padre, el señor Octavio Martínez, el ilustrador profesional Juan Ignacio Sánchez y su hermana Scarlett (ella ilustró el cuento “El mundo de los locos”). La portada corrió a cargo del maestro caricaturista Gilberto “Beto” Méndez Salinas, donde se representa a Zauriel como un caballero, como un Quijote, con una pluma por arma.
Actualmente Zauriel es integrante del Seminario para las Letras Guanajuatenses 2018 “Efraín Huerta”, en el rubro de poesía, con un proyecto titulado Un acto hacia afuera, bajo la asesoría del poeta Ángel Ortuño. En dicho proyecto, el joven autor se apropia de la estructura del teatro clásico (tres actos y un interludio) intentando dar una voz a la “confusión generacional” en la que está inmerso, en la cual “la toxicidad y los coqueteos con la locura son al del día a día”. Zauriel reconoce a Ortuño como un buen maestro, y se refiere a él como una de las personas “más apasionadas y preparadas que he conocido, además de un talentoso poeta. Gracias al taller con él he aprendido mucho y me ha abierto nuevas maneras de ver las letras.”
Del mismo modo, Zauriel ha empezado a escribir una novela cyber punk y quiere retomar la música para componer obras propias (toca la guitarra). Es encargado del Deleité café en San Luis de la Paz y estudia Ingeniería en Gestión de Tics en la Universidad Virtual del Estado de Guanajuato. Planea continuar sus estudios becado, en Rumania.
A sus lectores, quisiera darles el siguiente mensaje: “Simplemente lee. A veces es lo único que necesitas. Alguien ya ha pasado por lo que tú, y lo escribió. Sigue adelante. Quizá no haya un plan divino para ti, pero ya se te ocurrirá algo en el camino.”
