Amé la escafandra
Que caía en la luz funesta
De los hilos del vacío anhelante
Un pedazo de cuerda
Unos trozos más desperdigados
Cuarenta desdichas avecinadas
Y un mal que no dice
Tonto es el placer
De claudicar por otro estrafalario tedio
Sin rastrillos que necesitaste
Declara tu prominencia
Ahora es cuando odiar
Trineos al infierno nos llevarían
En la infancia encontrada
Trincheras ilusas están degradando
Él vino y ya no está
Lo quise para mí
Soy la vanidad
Acrecienta el ano triturado
El clavo solitario del cuento
Círculo de tabaco que sabiamente acaricias

La Nada no escatima gastos